sábado, 28 de julio de 2012

Capítulo 25.

LA LIMUSINA

La noche de chicas llegó a su fin tras terminar otros cuantos episodios de nuestras series preferidas.
- Buenos días.- dijo una voz dulce y cariñosa que yo reconocía entre mil.
- Buenos días.- respondí al joven que estaba a mi lado jugando con un mechón de mi pelo.- ¿Y Lola?
- Se está duchando... Tenemos un rato para nosotros.
Me puse de lado para mirarle a la cara.
- ¿Qué tal tu noche de chicas?
- Genial.
- Me alegro de que te lo pasaras bien...
- ¿Tienes algo que contarme?- su mirada lo delataba.
- Ayer por la noche vino a mi casa Jorge.
- ¿Jorge? ¿Y qué te dijo?
- Es muy largo.
 En ese momento entró Lola por la puerta.
- ¡Lo siento muchos chicos! No quiero molestar, ya me voy...- dijo preocupada.
- No tranquila no molestas- dijo Dani con una enorme sonrisa.
- Tú nunca molestas- respondí.
- Además, yo ya me tengo que ir a desayunar, nos vemos luego, os espero abajo dentro de una hora- dijo Dani, a continuación me dio un beso y se marchó.
- Es un chico genial- dijo Lola.
- Si que lo es. ¿Qué tal con Jorge?
- Me llamó antes...
- ¡¿Sí?!
- Sí.
- ¡Cuenta ya!
- Pues nada, que quiere que esta tarde vallamos a no se donde.
- Vas a ir, ¿no?
- Por supuesto.
 Las dos volvimos a reír.
Nos preparamos para ir a desayunar. Mientras Lola hablaba de forma animada con mi madre, yo hacía lo mismo con mi hermano; hasta que llamaron a la puerta. Fui a abrir.
- ¿Vamos?- dijo un chico moreno acompañado de otro que lucía una gran sonrisa.
- Claro, un momento... Lola, la limusina está aquí.
- Limusina... suena bien...- dijo Jorge.
 Nos reímos los tres mientras esperábamos a Lola. Y después cerramos la puerta y salimos a enfrentarnos al viejo mundo, que nosotros veíamos con nuevos ojos, con todas nuestras ganas.

miércoles, 25 de julio de 2012

Capítulo 24.

LA HISTORIA

Comenzamos a ver de nuevo 'Anatomía de Grey'.
-Es que es muy complicado de explicar...
-Creo que lo entenderé.- dije algo preocupada por Lola.
-Allá voy...
 >> Hace 19 años mi madre conoció a mi padre. Según mi hermana, se conocieron en un crucero, ella estaba allí con unas amigas celebrando sus 23, el número preferido por mi madre, y él trabajaba de camarero; mi padre tiró una copa de vino por encima de la falda de ella y así comenzó todo. Se casaron y al año siguiente, nació Iria, eran muy felices; vivían en San Francisco. Y a los tres años, llegué yo; mi madre murió y mi padre se quedó solo con dos hijas pequeñas y una terrible depresión. Una tarde nos dejó con la niñera cuando iba a trabajar y tubo un accidente de coche, en el que murió él y la chica que conducía el otro con el que chocó. Entonces, sin tener más familia nos llevaron al orfanato, adoptaron a mi hermana y a mi seis meses después. Yo era la típica niña rebelde, y siempre me devolvían al centro.
>> Y así durante los 15 años de mi vida. Hasta que ahora me adoptaron.
>> Hace un par de meses, apareció una chica que se parecía muchísimo a mi, y que me dijo que era mi hermana. Yo no me acordaba de ella, pero nos hicimos las pruebas y era cierto: éramos hermanas.
>> Y eso es todo.- dijo Lola apenada.
 Me quedé un par de minutos callada, sopesando toda la información que acababa de escuchar. Me parecía horrible todo lo que le había sucedido a Lola.
- Lo sé... es difícil. Pero no quería contártelo porque no quería que sintieras pena por mi ni pensaras en mi como ' la pobre Lola'.
- No pienso en ti como 'la pobre Lola' pienso en ti como la chica de pelo oscuro rizado que tiene un valor de estar sonriendo pese a todo, que admiro y que yo desearía tener.
Lola comenzó a llorar desconsolada.
- Nunca le había contado esto a nadie- dijo entre sollozos.
- Nunca había conocido a alguien tan valiente y fuerte como tú.
- Gracias.
- ¿Porque?
- Por ser mi única amiga.
Entonces sonó esa frase tan famosa de 'Anatomía de Grey'; "La felicidad no está en las cosas que planeas, si no en las que no ves venir" .
En ese momento me di cuenta de que no solo en Madrid había encontrado el amor, si no que también había encontrado una de las mejores personas que pudieran existir, y esa persona ahora mismo me estaba abrazando con tanta fuerza como le quedaba en toda ella.

martes, 24 de julio de 2012

Capítulo 23.

IRIA

- Te lo cuento si tu me cuentas lo que te pasa a ti- dijo Lola de sopetón en mitad de un capítulo de 'Mujeres Desesperadas'
- ¡¿Qué?! Si a mi no me pasa nada...- exclamé sorprendida.
- ¿Cómo que no? De pronto te quedas mirando hacia ninguna parte sin decir nada, en sabe Dios que mundo tuyo...
- No hago eso.
- Pues Dani también lo cree.
- ¿Desde cuando habláis Dani y tu de mi a mis espaldas?
- Relájate, ¿vale?
En ese momento me dio esa risa tonta que te da en algunos momentos.
- Lola, dime que te pasa; yo no pienso decirte nada porque no me pasa absolutamente nada.
- Vale, ya me lo contarás cuando quieras.
- ¿En serio?- dije riendo.
- Claro, es tu problema y una buena decisión sería contárselo a tu mejor amiga de Madrid y no callártelo para que te haga más daño ... pero como quieras, es tu problema...
- Eres...
- ¡Que ya sé que soy guapa!
Comenzamos las dos a reírnos.
Después de unos minutos, me di por vencida.
- A ver, no me pasa nada, es solo que algunas veces echo tantísimo de menos Galicia...
- Es normal.
-Vale, ya te lo dije, ahora cuéntame lo que te pasa a ti.
- Es que... mi hermana vive aquí.
- ¿Cómo?
- Si, tengo una hermana, se llama Iria, es tres años mayor que nosotras; y como ya es mayor de edad, podría irme a vivir con ella, como si me adoptara, pero no quiero hacerle eso a mis padres adoptivos. Han sido muy buenos conmigo y me parece horrible hacerles algo así...
- Valla... no sé que decir.
- Lo sé...
- A ver, por partes; ¿porque quieres irte con tu hermana?
- Porque es mi hermana y ella está buscando a mi madre... en el hospital pone que murió en mi parto, pero yo no me lo creo.
- Me tienes que contar la historia desde el principio, si no, no te entiendo.
- Es... complicado.

viernes, 20 de julio de 2012

Capítulo 22

NOCHE DE CHICAS.

Pasados unos cuantos besos, era la hora en la que había quedado con Lola y Dani se marchó por la ventana.
Llegó mi amiga dispuesta para una noche de chicas, traía una bolsa de viaje colgada de su hombro con su pijama y la ropa para el día siguiente y una bolsa de la compra en la otra mano libre, más tarde comprobé que en ella había gominolas, helado de chocolate y vainilla, bebidas y todo tipo de paquetes de patatas fritas.
- Valla, ¿qué has traído? Parece que vamos a estar meses aquí...- dije al ver el contenido.
- Se me ha ocurrido que podemos hacer maratón de 'Mujeres Desesperadas' y de 'Anatomía de Grey'... ah y  'New Girl' no puede faltar...
- ¡Si! Es una idea genial.. y mientras nos atiborramos con todo esto...
- Por supuesto...
Comenzamos a reírnos las dos.
Estuvimos buscando durante media hora una página para ver esas tres series sin descargar, y al final encontramos una página en inglés, pero con subtítulos.
Empezamos por 'Anatomía de Grey' vimos unos cinco capítulos, los de la temporada en la que llega Lexie, la hermanastra de Meredith y esta no la acepta.
- Creo que Meredith es demasiado dura con Lexie...- dijo Lola.
-Sí, yo creo que también; los hermanos son hermanos y hay que perdonarse.
- Ya, pero hay que comprender a Meredith... Un día, aparece su hermana, hija del padre que la abandonó a ella y a su madre con alzheimer, se las tubo que ver sola, ella sola y ahora cuando menos se lo espera llega ella y espera que su 'querida hermana' le abra las puertas de su casa de par en par...
- Lola, tampoco hay que ser así; hay que saber pedir perdón y perdonar.
-Eso si te piden perdón a ti y te perdonan. No vas a ir tu de perrito faldero siempre perdonando; porque lo único que conseguirás en no tener respeto en ti misma.
- Ya, pero el ego no puede dominar nuestros actos.
- Hay que distinguir entre ego y respeto.
- Lola, ¿me quieres decir ya que te pasa?
- Nada.
- Vale, ya me lo contarás cuando quieras...
- Estas siendo compasiva para que te lo cuente, ¿no?
- Lo aprendí de un amigo mío, y siempre funciona.
- Conmigo no.
- No estoy tan segura.
- Yo si.

lunes, 9 de julio de 2012

Capítulo 21.

LA NOTICIA.

Después de varios minutos charlando con Lola, me di cuenta de que necesitaba hacer lo que hacía antes con mis amigas; sí, necesitaba una noche de chicas. Se lo propuse a mi nueva amiga, y me dijo que le parecía muy bien, y que se lo preguntaría sus padres.
Se fue y, en ese momento apareció por la ventana quien yo sabía.
- Hola. ¿Se puede?- preguntó cuando ya estaba dentro.
- Hola, las personas normales llaman y luego entran.
- Ya, pero yo no soy normal, ¿o no me digas que aún no te habías dado cuenta antes?
- Claro que me había dado cuenta, pero no quería desilusionarte...
- Ya claro...
Mientras me acercaba a la ventana y a el, le di un suave beso en los labios; cosa que a Dani no contentó demasiado, pues volvió a darme otro beso más intenso.
- ¿Qué tal tu tarde?- preguntó mientras me abrazaba.
- Muy bien. Ah, y te aviso, que esta noche voy a tener noche de chicas.
- ¿Noche de chicas?- se preguntó extrañado.
- Sí, con Lola...
- Ah Lola... me cae bien esa chica.
- Sí, y a mi... ¿Y tú qué tal?
- Yo genial, como siempre.
- Pues me alegro mucho.
Nos volvimos a dar un beso más. Y luego otro. Y porque no, otro más.
- Oye, ¿tú conoces a Jorge?
- ¿El skater?
- Sí.
- ¿Porqué lo preguntas?
- Nada, simple curiosidad.
- Ya, curiosidad; pues sí, lo conozco. Es un buen chico.
- Ah.
- Ahora en serio, ¿porque lo dices?
- Es que... verás....
Le conté toda la historia de Lola con ese chico.
- Valla- dijo cuando yo terminé de contarle lo sucedido- Y eso que Lola parecía una mosquita muerta...
- ¡No digas eso! Es muy buena amiga, y aquí lo creas o no, me ayuda mucho...
- Sí, no te digo lo contrario a mi también me parece muy maja y todo eso...
- A sufrido mucho... es adoptada y siempre a ido de centro en centro. Nunca a tenido una vida.
- Eso si que es duro. ¿Sabes qué?
- Dime amor.
- ¿Cómo?
- ¿Qué?
- ¿Cómo me has llamado?
- Amor... valla, esto parece una escena de la película de 'Perdona si te llamo amor'.
- Es que nunca nadie me lo había llamado antes.
- Alguna vez tiene que ser la primera, pero haber, dime.
- Jorge también es adoptado.
- Valla, ¿en serio?
- No, es mentira si te parece.
- Perdón señor Borde.
- Lo siento cielo...
Me obsequió con un nuevo beso.

sábado, 7 de julio de 2012

Capítulo 20.


LOLA Y SUS MIEDOS.

Después de estar algunos minutos más con Dani, le ayudé a recoger y nos fuimos a casa.
Me apetecía descansar un rato después de tantas cosas que habían pasado. Necesitaba dejar de pensar, y para eso lo mejor era leer.
Me despedí de Dani y le dije que lo vería por la noche
Entré en casa y subí directa a mi habitación y cogí mi móvil. Puse música Come on get higher, de Matt Nathanson. Comencé a escuchar esa bonita canción. "So come on, get higher, loosen my lips. Faith and desire at the swing of your hips. Just pull me down hard. And drown me in love". Me sabía la canción de memoria, recordaba la primera vez que la escuché; me la había pasado Maite, mi amiga con la que con compartía mis raros gustos musicales; a pocas personas le gustaban esos cantantes tan extraños, pero a nosotras dos, nos fascinaban. 
Preferí cambiar de canción muy a mi pesar, pero es que algunas veces, prefieres escuchar canciones nuevas, porque todavía no has tenido tiempo de asociarlas a nada. Me decidí por un chico que cantaba en Internet haciendo cover a canciones famosas, era Thousand milles, de Alex Goot, no recordaba el nombre de su cantante real. 
Pero, por desgracia esa canción también me recordaba a alguien especial para mi; mi padre. Algunas veces tienes que dejar de pensar, y concentrarte simplemente en las canciones que estás escuchando.
Sin dejar de tararear la melodía, fui hacia mi escritorio y cogí un libro; uno de Blue Jeans, Cállame con un beso. Ya lo había leído, pero no me importaba en absoluto hacerlo otra vez. 
Me fascinaba el modo que tiene de redactar los hechos de esa forma; sin dejar de ser tan... romántico y tan realista al mismo tiempo. 
Comencé a leer al fin.
Estuve un tiempo concentrada en mi novela, hasta que llamaron a la puerta.
- Hola- dijo Lola de forma tímida.- Te iba a llamar, pero preferí venir; tu madre me dijo que subiera.
- Hola- le respondí mientras de había un hueco para que se viniera a sentar a la cama a mi lado.
- ¿Qué tal la sesión de cine?- dijo con una sonrisa pícara mientras cerraba la puerta.
- ¿¡ Lo sabías!? Serás...
- Guapa, lista... no, perfecta.
Las dos nos empezamos a reír.
- Ha sido.... una de las mejores tardes de mi vida.
- Supongo.
- ¿Y con tu príncipe azul?
- Jorge es maravilloso; creo que me gusta muchísimo.
- Me alegro mucho, ya lo sabes.
- Yo no tanto...
- ¿Cómo? No te entiendo.
- Sí, a ver, por una parte me alegro de poder tenerle, de haberle conocido; pero por otro lado, es complicado, porque, yo no tengo experiencia en esto, y no quiero que me haga daño.
La miré con la cara más tierna que había puesto en toda mi vida. Le di un abrazo y un beso en la mejilla.
- Tranquila, tu ya no estás sola en Madrid.- dije mientras le limpiaba una lágrima vergonzosa que asomaba por su ojo.
- Gracias Vero, creo que no está tan mal este sitio al fin y al cabo.
- Si, yo pienso lo mismo. 
- Pero, es que es tan irreal todo... 
- Llevo pensando lo mismo desde que llegué... pero, es nuestra nueva vida y hay que acostumbrarse.
- Supongo que si. 

viernes, 6 de julio de 2012

Capítulo 19.

SESIÓN DE CINE.

Minutos después me llamaron al móvil, era Dani. Me preguntó que si comíamos juntos; yo le respondí que por supuesto pero que no quería más sorpresas por ahora; el dije que me esperaba en la pizzería en un cuarto de hora.
Cuando llegué al lugar citado, me resultó extraño que estuviese cerrado todavía. Llamé a Dani para saber si ya había llegado, y me dijo que pasara, que el estaba dentro.
Así lo hice, y, para mi sorpresa, volvía a tenerme otro pequeño regalo.
-Dani, ¿qué es esto?- le pregunté al ver asombrada todo lo que había alrededor de mi.
Había un ordenador portátil encima de una de las mesas del establecimiento, con un proyector a su derecha y una sábana colgada de la pared; por no mencionar lo hermoso que estaba todo: adornado con mucho cuidado y dedicación; había escasa luminosidad y la poca que habitaba aquel lugar provenía de focos rodeados por cartulinas rojas para que propagasen luz de ese mismo color, lo que había dado el efecto propio.
- Nada, que creía que te apetecería ver una peli después de tu ajetreado día de trabajo- repuso con una sonrisa.
Sonreí una vez más. No sé como lo hacía, pero siempre salía con la suya.
- Eres increíble. Primero me traes a Aaron hasta aquí, ahora esto; me estás acostumbrando muy mal...- mientras decía esto, me acercaba hasta el para darle un suave beso.
- Habla la que no me deja en paz en todo el día, me estoy cansando de tenerte siempre en mi cabeza. En serio, cansas.- dijo haciendo una mueca de enfado.
- A ver nené...- no podía resistirme a ese chico más. Lo volví a besar casi de forma instintiva.
- Bueno, ¿vemos la peli?- preguntó mientras se sentaba en un butacón de color marrón.
- Claro, ¿cuál es?- dije mientras ocupaba el lugar libre que quedaba a su izquierda.
- Ya lo verás.
Cogió un bol de palomitas de encima de la mesa junto con unas botellas de Coca- Cola y le dio al play de su ordenador.
Comenzó una música que hizo que casi me resbalara la primera lágrima. Era Tres metros sobre el cielo, la versión española del libro de Federico Moccia, un escritor que me fascinaba.
No me podía creer que montara todo eso para mi. Durante varias horas estuvimos completamente inmersos en la historia de Babi y Hache.


- ¿Te ha gustado?- dijo mientras me limpiaba una de tantas lágrimas que corrían por mi cara como locas.
- ¿¡ Estás de broma!? Ha sido perfecto.
- Sabía que te iba a gustar. Estaba convencido. Y bien, ¿cual es tu punto de vista como posible periodista de críticas?
Me quedé asombrada.
- ¿Qué? ¿Cómo sabes tu eso?
- Me dijo Aaron que querías estudiar periodismo, cosa que no me llamó nada la atención.
- Valla...
- Entonces que, ¿tengo que esperar a verlo en un periódico para saber lo que opinas de la película?
Sonreía con esa broma.
- Bueno, me gusta mucho la mezcla de ambos mundos, la perfección de Babi y la realidad de Hache. También me encanta esa sensación que transmite, tanto los actores como los guionistas, te hacen sentir exactamente a tres metros sobre el cielo; te hace sentir envidia por esos chicos que son capaces de olvidar el resto del mundo para poder disfrutar de unos minutos solos. Parece que estás completamente dentro de la historia e imaginas que eres uno de los protagonistas y ese es uno de los grandes sueños de cualquier buen escritor que se precie. Por no hablar de la banda sonora, que es maravillosa, sobretodo la canción de Stop the clocks. Esta película te contagia esas ganas de querer perseguir a tu Hache hasta el fin del mundo, porque cuando puedas estar con él como está Babi, tendrás tu recompensa. Y el final, como no en todos los libros, no tiene porque ser bueno, hay muerte, dolor y desamor, como en la propia vida; por eso es tan buena, por mezclar elementos reales e imaginarios.
- Valla; serás una buena periodista. Me tienes que dar un autógrafo.
- No te pienso firmar nada sin hablar antes con mi abogado.
- Con que abogado eh guapita... ya te daré yo abogado...
 Se tiró sobre mi y empezó a hacerme cosquillas. Paró un instante para poner música. Ese tema lo reconocería en cualquier parte, Snow Patrol, Chasing cars.
En ese momento me di cuenta de que no tenía nada que envidiar a Babi, pues yo tenía conmigo a la versión mejorada de Hache.

martes, 3 de julio de 2012

Capítulo 18.

CONVERSACIONES.

Una vez llegué a casa, me conecté al Tuenti; desde que había llegado a Madrid lo tenía muy desatendido. La verdad es que nunca me habían gustado demasiado las redes sociales, prefería hablar por teléfono, pero ahora no estaba como para gastar demasiado, así que, no había más remedio que el MNS, el Tuenti y el Twitter para hablar con mis amigos gallegos.
Puse música en el reproductor, una canción de The Script, Breakeven. Una canción que solía escuchar mucho cuando estaba en Galicia. Siempre me habían gustando ese tipo de canciones un poco raras, de autores poco conocidos. Pero si algo solía gustarme era el rock, pero no el rock que le gusta a todo el mundo, cosas como Green Day o así, más bien baladas en inglés.
En Tuenti, tenía dos eventos, varios comentarios que me preguntaban como iba en Madrid, algún privado y varias peticiones de amistad. Tras haber respondido a todas esas personas que se preocupaban, miré en el chat haber si había conectado alguien... estaba Kike, Judith, Nines y Fran. El último fue el que me empezó a hablar.
Fran- Te quiero.
Yo- Fran...
Fran- Lo siento...
Yo- Liarte con otra no significa mucho.
Fran- Ya te lo han contado.
Yo- Si.
Fran- Quien a sido? Stela, no?
Yo- Eso da igual.
Fran- No, no da igual. Desde que te fuiste está todo muy raro, ya casi no me hablo con los demás, ahora suelo estar más con Vanessa y con estos.
Yo- Menudas compañías que te buscas.
Fran- Pues me han demostrado que les importo más que a Kike, Nines, Maite y estos.
Yo- Ya claro, ellos si te pasan porros.
Fran- Cállate, no sabes de lo que hablas.
Yo- Claro que no lo sé, porque el que creía que era mi amigo no me ha contado nada.
Fran- Pero para eso ya tienes a tu mejor amiga Stela para que te lo cuente, no?
Yo- Deja ya a Stel, esto es entre tu y yo. A los demás ni los menciones.
Fran- Claro, como son tus amiguitos...
Yo- Fran, cállate ya; no quiero hablar contigo.
Fran- Pues yo si contigo.
Yo- Mira, yo voy a tener la suficiente madurez que te falta a ti y voy a dejar este tema para hablar en persona.
Fran ni se molestó en contestar más. En ese momento, iba a cerrar Tuenti; hoy las redes sociales no me habían ayudado demasiado; pero en ese momento me habló Nines.
Nines- Hola preciosa! Que tal todo? Puedes poner la cam? Es que todos tenemos muchas ganas de verte.
A continuación había una solicitud para hablar por la cam; me peiné un poco y la acepté.
- ¡Hola Nines! Chicos, Dios, cuantas ganas tengo de veros...
Estaban todos con ella. Todos menos Fran.
- Hola, nosotros también de verte a ti.- dijo Antonio con una gran sonrisa. Echaba de menos que me animara en esos momentos cuando no había nadie; él era un gran amigo.
- Os echo de menos. Mucho.- no sabía cuanto tiempo podía aguantar las lágrimas.
- No llorarás, ¿verdad? Si sabemos eso no te ponemos más la cam... - dijo Javi con otro gran sonrisa y a continuación, hizo una mueca de enfado.
- Vale vale, no lloro.- dije con resignación.
- Estás muy guapa.- dijo Germán.
- ¡¿Qué dices?! Si estoy horrible...
- Claro...- dijo Raquel.
- Bueno, ¿y qué tal por Galicia?
- Bien pero... - dijo Maite, pero Stela la miró fulminándola.
- ¿Pero qué?- dije extrañada.  
- Nada, no le hagas caso...- dijo Raquel.
- Si algo si. Chicos, sabeis que me lo podeis decir...
- No, por cam no, y por teléfono tampoco, mejor el viernes, quedamos y te lo contamos todo- repuso Kike con una mirada de esas que solo te dedican esos amigos que realmente te quieren. Era una mirada de afecto, de cariño, de ternura, de amistad.
- Vale, yo también tengo que contaros...
-¿Es bueno o malo?- dijo Maite riendo.
- Supongo que bueno...- dije con cara pensativa.
Al otro lado de la cam, se escucharon grandes risotadas.
- Bueno chica, nos tenemos que ir, Kike tiene una competición. Te queremos.
- Chao, muchísima suerte Kike. Yo también os quiero.
- Esta actuación te la dedicaré ti.- repuso el aludido guiñándome un ojo.
- Que afortunada soy... muchas chicas pagarían millones por estar en mi lugar...
Todos reímos y, una vez más, me di cuenta de que, aquellos chicos eran la cosa más importante que la vida me había dado y, que al menos por ellos tenía que intentar estar bien en Madrid y aunque no lo consiguiera, siempre estaría más cerca de rozar lo que algunos llaman felicidad.